nació el
23 de noviembre de
1876 en el domicilio familiar de la Plaza de Mina número 3 en
Cádiz, hijo de José María Falla y Franco y de María Jesús Matheu y Zabala. Recibió sus primeras lecciones de
solfeo de mano de su madre, intérprete de
piano, y su abuelo. A los 9 años de edad continuó sus estudios musicales con una profesora de piano llamada Eloísa Galluzo. Además su nodriza le enseñó
nanas y canciones populares que dejaron huella en él. En
1889 prosiguió sus estudios de piano con Alejandro Odero y aprendió
armonía y
contrapunto con Enrique Broca. A los quince años sus intereses eran principalmente la
literaturay el
periodismo. Con un grupo de amigos fundó la revista literaria "El Burlón" y en
1890 participó en una segunda titulada "El Cascabel", que terminó dirigiendo. En
1893, tras asistir a un concierto en Cádiz donde se interpretaron, entre otras, obras de
Edvard Grieg sintió, según sus propias palabras, que su "vocación definitiva es la música".
[editar]Traslado a Madrid
A partir de
1896 comenzó a viajar a
Madrid, donde asistió al
Real Conservatorio de Música y Declamación. Allí se perfeccionó en piano con
José Tragó, un condiscípulo de
Isaac Albéniz. En
1897 compuso
Melodía, una obra para
violonchelo y piano y dedicada a
Salvador Viniegra, ya que Falla participaba en las sesiones de
música de cámara que se realizaban en casa de éste. Ese mismo año se trasladó definitivamente a
Madrid, donde al año siguiente finalizó con honores sus estudios en el Conservatorio. Al año siguiente superó, con la calificación de sobresaliente, los tres primeros años de solfeo y cinco de piano en el Conservatorio, en calidad de alumno libre, y compuso
Scherzo en do menor. En
1899 terminó los estudios oficiales en la Escuela Nacional de Música y Declamación y obtuvo, por unanimidad, el primer premio de piano de dicho centro. Ese mismo año estrena sus primeras obras:
Romanza para violonchelo y piano,
Nocturno para piano,
Melodía para violonchelo y piano,
Serenata andaluza para violín y piano,
Cuarteto en Sol y
Mireya. Por esa época, el joven músico añadió el "de" a su apellido, con el que sería conocido.
En 1900 compuso
Canción para piano y algunas piezas vocales y para piano. Estrenó
Serenata andaluza y
Vals-Capricho para piano en el
Ateneo de Madrid. Debido a la precaria situación económica de la familia, comenzó a impartir clases de piano. Realizó sus primeras obras de
zarzuela, como
La Juana y la Petra o
La casa de tócame Roque.
En
1901 conoció a
Felip Pedrell, quien tendría notable influencia en su posterior carrera ya que despertó en él el interés por el
flamenco y, en especial, por el
cante jondo. Compuso obras como
Cortejo de gnomos y
Serenata, ambas para piano y tras componer algunas zarzuelas, hoy perdidas u olvidadas, como
Los amores de Inés y
Limosna de amor.
El
12 de abril de
1902 estrenó, en el
Teatro Cómico de Madrid,
Los amores de la Inés y ese mismo año conoció a
Joaquín Turina y la Sociedad de Autores publicó
Vals-Capricho y
Serenata andaluza. Al año siguiente compuso y presentó
Allegro de concierto al concurso convocado por el Conservatorio de Madrid, que finalmente ganó
Enrique Granados y la Sociedad de Autores publicó las obras
Tus ojillos negros y
Nocturno. Ese mismo año, comenzó su colaboración con
Amadeo Vives las zarzuelas
Prisionero de guerra,
El cornetín de órdenes y
La cruz de Malta, de las que sólo se conservan algunos fragmentos.
En abril de
1905 obtuvo el premio de piano convocado por la firma Ortiz y Cussó. El
15 de mayo de ese año estrenó en el Ateneo de Madrid la obra
Allegro de concierto. El
13 de noviembre la Academia de Bellas Artes otorgó el premio de su concurso a
La vida breve.
[editar]Etapa parisina
Paul Dukas, al que Manuel de Falla conoció durante su estancia en
París, fue una gran influencia para el compositor gaditano durante su estancia en la ciudad.
La siguiente etapa de su formación tuvo lugar en
Francia. En
1907 se afincó en
París, por consejo de
Joaquín Turina y
Víctor Mirecki Larramat, y allí entró en relación con
Claude Debussy,
Maurice Ravel,
Paul Dukas,
Isaac Albéniz,
Alexis Roland-Manuel,
Florent Schmitt,
Ricardo Viñes o
Pablo Picasso. Es difícil saber qué experiencia vívida puede cambiar el rumbo de una sensibilidad artística creadora pero la relación que Falla mantuvo con estos músicos en París influyó de manera determinante en su música posterior. Por ejemplo, Debussy quien había oído y admiraba el arte
flamenco de España, le aconsejó que tomara esta música como fuente de inspiración; consejo que el español debió tener en cuenta en obras como
Noches en los jardines de España, en que el
impresionismo contemporáneo se utiliza casi como soporte para armonías, ritmos y sonoridades flamencas.
El
27 de marzo del año siguiente se estrenaron en la
Salle Érard las
Cuatro piezas españolas interpretadas por Ricardo Viñes, que más tarde fueron publicadas por el editor Jacques Durand gracias a la recomendación de Dukas, Debussy y Ravel. Ese mismo año comenzó a componer
Noches en los jardines de España y revisó sustancialmente la
orquestación de
La vida breve. El
4 de mayo de
1910 la
soprano Ada Adiny-Milliet estrenó en la
Société Nationale Indépendante, acompañada al piano por Falla, las
Trois mélodies, realizadas sobre textos de
Théophile Gautier y que fueron publicadas por
Rouart, Lerolle et Cie. En ese mismo año se produjo su primer encuentro con
Ígor Stravinski y conoció a
Georges Jean-Aubry,
Ignacio Zuloaga,
Joaquín Niny
Wanda Landowska. Un año más tarde realizó su primera visita a
Londres y en marzo ofreció algunos recitales.
En 1914 compuso las
Siete canciones populares españolas. Tras el inicio de la
Primera Guerra Mundial, Falla regresó a su país natal y fijó su residencia de nuevo en Madrid. El
14 de noviembre se representó
La vida breve en el
Teatro de la Zarzuela y en el mes siguiente termina la
Oración de las madres que tienen a sus hijos en brazos.
[editar]Vuelta a Madrid
El
15 de enero de
1915,
Joaquín Turina y Manuel de Falla fueron homenajeados por el
Ateneo de Madrid. En dicho homenaje se estrenaron las
Siete canciones populares españolas, interpretadas por la
soprano Luisa Vela y acompañada al piano por el propio Falla. El
8 de febrero se realizó el concierto de presentación de la Sociedad Nacional de Música en el
Hotel Ritz de Madrid, en el que la soprano
Josefina Revillo interpretó por primera vez la
Oración de las madres que tienen a sus hijos en brazos. El
15 de abril tuvo lugar el estreno de la primera versión de
El amor brujo en el Teatro Lara, interpretado por
Pastora Imperio en el papel de Candelas y bajo la
dirección orquestal de
José Moreno Ballesteros, padre de
Federico Moreno Torroba, quien tocó la parte de
piano. A finales de marzo y principios de abril acompañó a
María Lejárraga en viaje por
Granada,
Ronda,
Algeciras y
Cádiz. Poco después se trasladó a
Barcelona con el matrimonio Martínez Sierra y su estancia en la ciudad se prolongó casi seis meses. Fue invitado por
Santiago Rusiñol a pasar unos días en el
Cau Ferrat de
Sitges y allí trabajó intensamente en las
Noches en los jardines de España. El
23 de septiembre, el
sexteto de
José Media-Villa estrena en
Portugal una versión de
El amor brujo realizada por el mismo Falla. El
18 de diciembre concluyó
El pan de Ronda que sabe a verdad, una obra realizada sobre un texto de María Lejárraga.
El
28 de marzo del año siguiente la
Orquesta Sinfónica de Madrid, dirigida por
Enrique Fernández Arbós, estrenó la primera versión de concierto de
El amor brujo en el Hotel Ritz de Madrid. El
9 de abril, se estrenó en el
Teatro Real la obra
Noches en los jardines de España a cargo de la misma orquesta, junto con el pianista
José Cubiles y dirigida de nuevo por Fernández Arbós. Junto con el matrimonio Martínez Sierra, comienza a trabajar en la pantomima
El corregidor y la molinera, basada en la
novela El sombrero de tres picos de
Pedro Antonio de Alarcón. En el número de abril de la
Revista Musical Hispano-Americana se publicó el texto de Falla "Enrique Granados, Evocación de su obra" y el
periódico La Tribuna del
5 de junio hizo lo propio con "El gran músico de nuestro tiempo: Igor Stravinsky". Falla entabló contacto con
Ígor Stravinski y
Sergéi Diágilev, cuyos célebres
Ballets Rusos se hallaban por aquella época en Madrid, e inició un viaje por el sur del país acompañado por Diágilev y el
bailarín Léonide Massine. A lo largo de esa primavera y verano se realizaron varios conciertos en
Sevilla, Cádiz y
Granada. El
26 de junio interpreta
Noches en los jardines de España junto a la Sinfónica de Madrid dirigida por
Arturo Saco del Valle, en el
Palacio de Carlos I de Granada. Además, realizó el
prólogo de la obra
La música francesa contemporánea, de
Georges Jean-Aubry y en el número de diciembre de la
Revista Musical Hispano-Americana publicó un nuevo artículo titulado "Introducción al estudio de la música nueva".
El
7 de abril de
1917 se estrenó en el
Teatro Eslava la obra
El corregidor y la molinera a cargo de una orquesta formada por profesores de la
Sociedad Filarmónica de Madrid, dirigidos por Joaquín Turina. El
29 de abril, la Orquesta Sinfónica de Madrid, dirigida por Enrique Fernández Arbós realizó una interpretación en el Teatro Real de una versión de concierto para pequeña orquesta de
El amor brujo. Ese mismo año Falla realiza el prólogo de la "Enciclopedia abreviada de Música", de Joaquín Turina, y publicó "Nuestra música" en el número de junio de la revista
Música. Durante el verano inició un nuevo viaje por España con Diágilev y Massine y el
8 de octubre acudió a
Fuendetodos a la inauguración de un monumento en homenaje a
Francisco de Goya. Antes de finalizar el año, inició una nueva gira por el norte de España acompañando a la soprano
Aga Lahowska.
En
1918 comenzó a componer la
ópera cómica Fuego fatuo, con libreto de María Lejárraga, pero que no llegó a estrenarse. El
27 de abril, Falla pronunció una conferencia titulada "El arte profundo de Claude Debussy" en un homenaje que rindió el Ateneo de Madrid al compositor francés. Por encargo de la
princesa Edmond de Polignac compone
El retablo de Maese Pedro, que estrena en el salón parisiense de ésta.
En
1919 fallecieron sus padres, el
12 de febrero su padre y el
22 de julio su madre. El
22 de julio los Ballets Russos de Diágilev realizaron el estreno de
El sombrero de tres picos en el
Alhambra Theatre de
Londres, con
coreografía de Massine y decorados y figurines de
Pablo Picasso. Esta obra pasó a formar parte del repertorio fijo de la compañía rusa. Por encargo de
Arthur Rubinstein comienza a componer
Fantasia Baetica e inició las negociaciones del contrato con J. & W. Chester de Londres, que se pasaron a ser sus principales editores. El Centro Artístico de Granada le tributó un homenaje el
15 de septiembre, por lo que Falla realizó un viaje a la ciudad, en compañía de su hermana María del Carmen y del matrimonio
Vázquez Díaz. Durante su estancia en la ciudad, se hospedó primero en la Pensión Alhambra, donde su amigo desde su estancia en París,
Ángel Barrios, le reservó habitaciones, y más tarde en la Pensión Carmona, según su primer biógrafo,
John Brande Trend, al que conoció durante ese viaje. Ambas pensiones estaban situadas en la Calle Real de la
Alhambra. Allí llevó una vida retirada, rodeado de un grupo de amigos entre los que se encontraba
Federico García Lorca.
[editar]Etapa granadina
Manuel de Falla, alrededor de
1920.
El estreno de
Homenaje pour le Tombeau de Claude Debussy tuvo lugar el
24 de enero de
1921 en París, con la interpretación del
arpa-
laúd a cargo de
Marie-Louise Henri Casadesus. El estreno en su versión para guitarra fue realizado por
Miguel Llobet durante una gira por España un mes más tarde. En esa época, Falla estuvo muy vinculado con la vida cultural de la ciudad andaluza y frecuentó las amistades de personajes como
Miguel Cerón,
Fernando de los Ríos,
Hermenegildo Lanz,
Manuel Ángeles Ortiz y, sobre todo,
Federico García Lorca. En mayo realizó un viaje a
París y
Londres, ciudad en la que interpretó la parte para piano de
Noches en los jardines de España en el
Queen's Hall. A su regreso a España coincidió en la capital con
Ígor Stravinski que estaba dirigiendo en el
Teatro Real su
ballet Petrushka. Durante años había mantenido una estrecha relación personal y profesional con el matrimonio Martínez Sierra, que se rompió debido a desacuerdos en torno al proyecto de una obra titulada
Don Juan de España. Tras esta ruptura, comenzó la composición de las dos
suites de
El sombrero de tres picos y termina
Fanfare pour une fête, por encargo de la revista
Fanfare de Londres, que sería publicada en su primer número en agosto.
A comienzos de
1922 estableció definitivamente su residencia en el carmen de la Antequeruela Alta, número 11. El diplomático
Ricardo Baeza, amigo de Falla, le encomendó el encargo de componer
Canto de los remeros del Volga, en favor de los refugiados
rusos. Realizó un viaje durante la
Semana Santa de Sevilla, durante el cual conoció a
Segismundo Romero y a
Eduardo Torres, con los que en un futuro colaboraría para formar la
Orquesta Bética de Cámara y que finalmente se presentaría el
11 de junio en
1924 con un concierto en el sevillano Teatro Llorens. Se unió a Miguel Cerón, Federico García Lorca, Hermenegildo Lanz,
Ignacio Zuloaga y otros para promover la creación del "Concurso de Cante Jondo" con el fin de rescatar el "canto primitivo andaluz". Dicho concurso fue organizado por el Centro Artístico y tuvo lugar los días
13 y
14 de junio en la Plaza de los Aljibes de la Alhambra.
El
6 de enero de
1923, Manuel de Falla, Hermenegildo Lanz y Federico García Lorca realizaron una función en casa de Lorca de
títeres de cachiporra en la que representaron obras de
Miguel de Cervantes, el propio Lorca o el
Misterio de los Reyes Magos, un
auto sacramental del
siglo XIII para el que Falla había compuesto la
música incidental. En febrero,
La Revue Musicale publicó dos artículos de Falla: "Felipe Pedrell, (1841-1922)" y "Wanda Landowska à Grenade", que detallaba la visita de dicha
clavecinista a Granada en noviembre del año anterior. Los días
23 y
24 de marzo se realizó el estreno en público de la versión de concierto de
El retablo de Maese Pedro en el Teatro San Fernando de Sevilla. La escenificación de la obra tuvo lugar en el palacete de la princesa de Polignac en París y los decorados y figurines fueron obra de
Manuel Ángeles Ortiz y los títeres con cabezas y figuras planas de Hermenegildo Lanz. Realizó algunos viajes a
Francia,
Bélgica e
Italia y en Madrid conoció a
Ernesto Halffter. Comenzó a componer
Concerto para clave y cinco instrumentos a instancias de
Wanda Landowska y el
12 de diciembre, Manuel de Falla y Ángel Barrios fueron propuestos como académicos por la
Real Academia de Bellas Artes de Granada, siendo finalmente admitidos por unanimidad como académicos de número el
21 de febrero del año siguiente.
A comienzos de
1924 finalizó la obra
Psyché, sobre un texto de
Georges Jean-Aubry, y que se estrenaría el
9 de febrero del año siguiente en el
Palau de la Música de Barcelona. El
7 de abril fue nombrado académico de honor de la Real Academia Hispano-Americana de Ciencias y Artes de Cádiz. En junio de dicho año tuvo lugar la presentación de la Orquesta Bética de Cámara, por la que llevaba trabajando desde hacía dos años. El
10 de diciembre se estrenó una revisión orquestal del
Prélude à l'après-midi d'un faune de
Claude Debussy que Falla había compuesto para dicha orquesta. Esta interpretación corrió bajo la dirección de Ernesto Halffter y tuvo lugar en el Teatro San Fernando de Sevilla.
El año siguiente aceptó el cargo como académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes de Granada. El
22 de mayo tuvo lugar el estreno en París de la versión definitiva para ballet de
El amor brujo en el
Trianon Lyrique, con decorados y figurines de
Gustavo Bacarisas, Falla ejerciendo como director musical y Antonia Mercé "La Argentina" y Vicente Escudero en los papeles de Candelas y Carmelo, respectivamente. El
20 de noviembre, la Orquesta Bética interpretó la revisión orquestal realizada por Falla de la
obertura de
El barbero de Sevilla de
Gioachino Rossini en el Teatro San Fernando de Sevilla, dirigida por su discípulo Ernesto Halffter. El
29 de diciembre tuvo lugar la representación de
El retablo de maese Pedro en
Nueva York, con la
Philharmonic Symphony Orchestra, Wanda Landowska y
Willem Mengelberg, como director. Fue nombrado miembro de la
Hispanic Society of America.
En
1926 participó en el homenaje que realizó el Centro Artístico en honor a
Luis Bagaría. Las representaciones de
El retablo realizadas en
Ámsterdam el
26 de abril, que contó con
Luis Buñuel como director de escena y con Willem Mengelberg como director de orquesta, y
Zúrich el
20 de junio en el
Festival de la Sociedad Nacional de Música Contemporánea fueron un éxito. Terminó la composición del
Concerto para
clavecín y orquesta de cámara, que fue estrenado el
5 de noviembre en el Palau de la Música de Barcelona por Wanda Landowska, acompañada por un grupo de profesores de la Orquestra Pau Casals y dirigidos por el propio Falla. Fue homenajeado con motivo de su cincuenta cumpleaños y recibió la distinción de "hijo adoptivo" de la ciudad de Sevilla el
20 de marzo e "hijo predilecto" de la ciudad de Cádiz en abril.
Los homenajes continuaron en
1927, ya que fue nombrado "hijo adoptivo" de
Guadix el
28 de febrero. Anteriormente, los días
8 y
9 de ese mismo mes, se realizaron sendos conciertos de la Orquesta Bética de Cámara en el Coliseo Olympia de Granada, dirigidos por Ernesto Halffter y el propio Falla, respectivamente. En
Barcelona, el
17 de marzo tuvo lugar el "Festival Falla", que contó con la presencia del compositor. El mes siguiente, Falla se unió al homenaje que el Ateneo de Granada rindió al compositor alemán
Ludwig van Beethoven. Falla compuso la música para el
Soneto a Córdoba de
Luis de Góngora como conmemoración del tercer centenario del fallecimiento del escritor, obra que fue estrenada el
14 de mayo en la
Salle Pleyel de París, con Madeleine Greslé y el propio compositor al piano. En esa época comenzó la preparación de la música incidental para la representación del
auto sacramental de
Pedro Calderón de la Barca El gran teatro del mundo que se realizó en la Plaza de los Aljibes de la
Alhambra el 27 de junio (aunque en un principio estaba planeada para el 18, problemas técnicos impidieron la representación) que fue organizada por el Ateneo de Granada y la Junta de Damas de Honor y Mérito. En dicha representación intervinieron además, Antonio Gallego Burín como director artístico, Hermenegildo Lanz como escenógrafo y Ángel Barrios como director de orquesta. El
5 de noviembre se realizó un "Festival Falla" en Madrid, en el que el propio compositor interpretó el
Concerto. Sus actuaciones finalizaron ese año el
11 de diciembre con un homenaje a
Domenico Scarlatti, del que interpretó 14
sonatas en el Ateneo de Granada.
El
30 de enero de
1928 tomó posesión de su cargo como académico de número de la Real Academia de Bellas Artes de Granada. En marzo realizó un viaje a París para supervisar una producción de
El amor brujo, que contaba con la presencia de Antonia Mercé "La Argentina" y los decorados y el vestuario fueron elaborados por Gustavo Bacarisas. En el
Théâtre National de l'Opéra-Comique se estrenó una producción de
El retablo de maese Pedro dirigida por Ignacio Zuloaga. El día 14, recibe la condecoración de caballero de la
Legión de Honor. En septiembre viajó a
Siena, en compañía de su amigo Juan Gisbert Padró, para actuar como solista en una audición del
Concerto y el 29 de octubre fue nombrado miembro de la
Kungliga Svenska Musikaliska Akademien Vágnar de
Estocolmo. Por esas mismas fechas fue visitado en Granada por Maurice Ravel.
En un principio, y para no entrar en disputas con
Conrado del Campo, que había preparado durante años la elección de Falla como miembro de la Real Academia de San Fernando, rechazó la invitación formulada por miembros de ésta para cubrir la plaza vacante a raíz del fallecimiento de
Manuel Manrique de Lara. El
13 de mayo de
1929, y tras las presiones de los académicos, Falla fue elegido por unanimidad, aunque nunca llegó a leer su discurso de ingreso.
John Brande Trend publicó el primer libro monográfico sobre Falla en Nueva York, titulado
Manuel de Falla and Spanish music. En esa época estaba totalmente inmerso en
Atlántida y tenía la esperanza de poder estrenar la obra en la
Exposición Universal de Barcelona o en la
Exposición Iberoamericana de Sevilla que se celebraban ese mismo año.
A finales de enero de
1930, fue visitado por
Alfredo Casella, que se encontraba en la ciudad realizando unos conciertos con el
Trío Italiano. En junio, realizó la grabación del
Concerto y algunas de sus canciones en París, en la que acompañó al piano a María Barrientos. En diciembre realizó un viaje a Cádiz para dirigir un concierto en el
teatro que lleva su nombre. Durante esta estancia en su tierra natal aprovechó la ocasión para realizar una excursión, inspirada por sus trabajos en
Atlántida, al
islote de Sancti Petri, lugar en el que supuestamente estarían las ruinas del
templo de Hércules.
En
1931 realizó su última visita a Londres para dirigir
El retablo de maese Pedro en una retransmisión de la
BBC. El
14 de mayo, un mes después de la proclamación de la
Segunda República en España, escribió junto con otros amigos granadinos, al
presidente de la República,
Niceto Alcalá Zamora, y a su amigo Fernando de los Ríos, ministro de Justicia, para pedirles que tomaran las medidas oportunas para detener la quema y saqueo de iglesias, así como el creciente proceso de "desevangelización" de España. Ese mismo año fue designado vocal de la recién creada Junta Nacional de Música.
En 1937, colabora con José María Pemán en un
Himno marcial para las fuerzas nacionalistas. Para ello, Falla arregla y adapta el "Canto de los Almogávares", de
Los Pirineos de
Felipe Pedrell, con letra nueva de José María Pemán.
[editar]Exilio en Argentina y fallecimiento
El
28 de septiembre de
1939, después de la
Guerra Civil Española y en puertas de la
Segunda Guerra Mundial, Manuel de Falla se exilió en Argentina, a pesar de los intentos de los gobiernos del general
Francisco Franco, que le ofrecían una pensión si regresaba a
España. Fue nombrado Caballero, con el grado de Gran Cruz, de la
Orden de Alfonso X el Sabio en 1940.
2 Vivió en su exilio argentino gracias a la ayuda de algunos
mecenas, entre ellos la familia Cambó, y lo hizo de forma tranquila en una casa en las sierras, donde su hermana cuidaba de él, ya que casi siempre estaba enfermo. Finalmente, falleció el
14 de noviembre de
1946 tras sufrir una
parada cardiorrespiratoria, sin que hubiera podido culminar su última obra. La tarea de finalizarla, según los esbozos dejados por el maestro, correspondió a su discípulo
Ernesto Halffter. En este país, exiliado, estrenaría su
Suite Homenajes.
Sus restos fueron trasladados desde
Buenos Aires, hasta su tierra natal,
Cádiz, a bordo del minador
Marte. En Cádiz fueron recibidos por su familia,
José María Pemán y diferentes autoridades eclesiásticas, civiles y militares, entre las que se encontraba el Ministro de Justicia,
Raimundo Fernández-Cuesta, en representación del Jefe del Estado,
Francisco Franco. El cortejo fúnebre se dirigió del muelle a la
Catedral de Santa Cruz de Cádiz, donde se celebró un solemne funeral. Con autorización expresa del papa
Pío XII, los restos fueron enterrados en la cripta de la catedral, donde se encuentran actualmente junto a los de
José María Pemán.
3
[editar]Análisis musical y estilo
Durante su estancia en París compuso sus obras más célebres: la
pantomima El amor brujo y el
ballet El sombrero de tres picos (compuesto para cumplimentar un encargo de los célebres
Ballets Rusos de
Sergéi Diágilev), las
Siete canciones populares españolas para voz y piano, la
Fantasia Baetica para piano y
Noches en los jardines de España, estrenada en el
Teatro Real en
1916. Su estilo fue evolucionando a través de estas composiciones desde el
nacionalismo folclorista que revelan estas primeras partituras, inspiradas en temas, melodías, ritmos y giros andaluces o castellanos, hasta un nacionalismo que buscaba su inspiración en la tradición musical del
Siglo de Oro español y al que responden la ópera para
marionetas El retablo de Maese Pedro, una de sus obras más alabadas, y el
Concierto para clave y cinco instrumentos. La madurez creativa de Falla comenzó con su regreso a
España, en el año
1914.
[editar]
Falla de joven.