Comentario: FIESTA DE SAN JUAN, A QUIEN AMABA JESUS, APÓSTOL Y EVANGELISTA (Jn 20, 1-8 )

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Jesús Mateo, es un sacerdote amigo de Valladolid, que manda diariamente  lindo comentario del Evangelio, que vale la pena meditarlo y compartirlo  también con  los seglares.

Yo lo pongo ahora todos los días en uno de mis Blogs. Franja.

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27 de Diciembre, Viernes, de 2019

Comentario: FIESTA DE SAN JUAN, A QUIEN AMABA JESUS, APÓSTOL Y EVANGELISTA (Jn 20, 1-8 )

1. Te cuento, lo primero,  la vida de San Juan Apóstol y Evangelista.

Era hermano de Santiago el Mayor, discípulo amado del Señor, testigo privilegiado de la Transfiguración de Cristo y de la oración en Getsemaní. Durante la Última Cena reclinó  su cabeza sobre el pecho del Señor y le fueron revelados los secretos divinos. Jesús  le encomendó, desde la cruz, a su Madre, y él la recibió en su casa.  Es autor del Último Evangelio, de tres cartas y del Apocalipsis. Desterrado en la isla de Patmos, en edad avanzada, entregó su espíritu al Señor.

2. Es una vida muy aleccionadora. Es un santo, yo diría, muy santo.

Era el más joven de los Doce  Apóstoles.

Al ver a Jesús, que "pasó" junto a él, lo siguió y pasó toda una tarde junto al Señor.

Nunca olvidó San Juan este encuentro. No quiso decir nada de lo que aquel día habló con el Maestro. Sólo sabemos que desde entonces no le abandonó jamás;  cuando ya anciano escribe su Evangelio, no deja de anotar la hora en la que se produjo el encuentro con Jesús: "era alrededor de la hora décima", las cuatro de la tarde.

¿Recuerdas, tú, el día y la hora en el que Jesús "pasó" junto a ti?

Jesús llama a Simón Pedro y a Juan ... 

Poco después Jesús le llama definitivamente  a formar parte de los Doce.

San Juan correspondió  a la llamada del Señor, y lo hizo con el corazón entero, con un amor indiviso, exclusivo: "Inmediatamente, dejó las redes y la barca  y a sus padres, y siguió a Jesús".

Yo me pregunto, una vez más, que tuvo que "ver" en Jesús para seguirle inmediatamente y dejarlo "todo". ¿Por qué, tú y yo, no lo "vemos"?

Toda la vida de San Juan estuvo centrada en su Señor y Maestro;  en su fidelidad a Jesús encontró el sentido de su vida.

3. San Juan recibió del Señor particulares muestras de amistad y de confianza

El evangelista se cita discretamente asimismo como "el discípulo a quien Jesús amaba".

Ello nos indica que Jesús le tuvo un especial afecto.

En el momento solemne de la Última Cena, cuando Jesús les anuncia la traición de uno de ellos, no duda en preguntar al Señor, apoyando la cabeza sobre su pecho, quién iba a ser el traidor.

4. La suprema expresión de confianza en el discípulo amado tiene lugar cuando, desde la Cruz, el Señor le hace entrega del amor más grande que tuvo en la tierra: su Santísima Madre

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Si fue trascendental en la vida de Juan el momento en el que Jesús le llamó para que le siguiera, dejando todas las cosas, ahora, en el Calvario, tiene el encargo más delicado y entrañable: cuidar de la Madre de Dios.

A San Juan, como a ningún  otro, pudo hablar la Virgen de todo aquello que guardaba en su corazón.

Hoy, en su festividad, miramos al discípulo,  a quien Jesús amaba, con una santa envidia, por el inmenso don que le entregó el Señor: La Virgen, y,  a la vez, hemos de agradecer los cuidados que con Ella tuvo hasta el final de sus días aquí en la tierra.

Jesús Mateo. Sacerdote.

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Que Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone nunca. Franja.

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Confeccionado por Franja

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