"VUESTRA RECOMPENSA SERÁ GRANDE EN EL CIELO". (Lc 6, 20-26)

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Jesús  Mateo, sacerdote de Valladolid me  envía el  Comentario del Evangelio de cada día,  y yo con gran placer lo edito en mis blogs católicos de difusión. Sé que hay muchas entradas porque muchos lo reciben y comparten para ayudarse en su tiempo de oración.

P. Javier Olivares.

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13 de septiembre, miércoles 2023

 

"VUESTRA RECOMPENSA SERÁ GRANDE EN EL CIELO". (Lc 6, 20-26)

El Señor en el evangelio de hoy nos habla de la felicidad. ¿Eres feliz? ¿Amas? Las personas felices son las almas enamoradas. Lo único que hace feliz es el amor. Es para lo que hemos sido creados, para amar. Tú fuiste creado para el amor. ¿Para qué vives en este mundo? ¿Para qué Dios te creó? Recuerda el primer Mandamiento de la Ley de Dios: "Amarás a Dios con todo el corazón, con toda tu alma, con todo tu ser, con todas tus fuerzas".

El mundo actual no es feliz. Existen odios, guerras, terremotos, olas de podredumbre, olas de no amor. Tu corazón y el mío están hechos para el amor y no descansará, como dice San Agustín, hasta que descanse en Dios, en el Amor. Qué hermosa es la vida para amar. Como dice el poeta, ¿para qué es la vida sino para darla?

 

Si me preguntases en qué consiste el amor te diría que en las cosas pequeñas. Hazlo todo por amor y no habrá cosas pequeñas. Dos vivencias: En una ocasión vi a una niña de cuatro añitos recoger en el campo unas margaritas. Se las entregó a su mamá. Ésta se emocionó y lo valoró más que un regalo de oro; era un regalo de amor.

Hace años jugando al tenis con un padre de familia observé que siempre cogía una flor de la finca donde jugábamos; es para mí esposa, me comentó, y le brillaban los ojos de amor. Hazlo todo por amor, te repito, y serás feliz y harás feliz a los que te rodean.

No te importe que te odien ni que te persigan; ni que pases hambre ni que a veces llores y lo pases mal, como leemos hoy en el Evangelio. Si amas y eres fiel al Señor serás feliz en esta vida y tú recompensa será grande en el Cielo. Los que aman, tú y yo, tienen un corazón grande. Son felices.

 

A la Virgen de los "ojos grandes", 

a la Virgen de un "corazón y un regazo grande", "lleno de ternura",  le pido para todos un corazón grande para amar como Ella.

Jesús Mateo. Sacerdote.

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Que el Señor nos bendiga y nos guarde con Santa María la Virgen y con San José su castísimo esposo.

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