Blog Católico de Santa María de Baiona,
nº. 757
¿Tienes quejas que presentar?
Oficina de
recolección de quejas
Nos ahogan miles de
quejas con las que señalamos
una y otra vez a los demás mientras olvidamos
nuestros propios pecados y
defectos.
Autor: P. Fernando Pascual LC |Fuente:
Catholic.net.
Oficina de recolección de quejas
El padre abad tuvo una idea. Redactó un texto y lo puso en las puertas del monasterio y de la parroquia:
“Visto que cada día cientos de
personas se quejan por lo que hace o deja de hacer el obispo; por lo que hacen
o dejan de hacer los sacerdotes; por lo que hacen o dejan de hacer los
catequistas y los demás agentes de la pastoral; por lo que hacen o dejan de
hacer los demás católicos.
Visto que nunca será posible
ponernos de acuerdo sobre el color de las flores para las procesiones del
Patrono, y que unos se quejarán contra lo que otros hayan decidido.
Visto que hay problemas reales que
merecen ser solucionados pero que no se arreglan si nos limitamos a murmurar,
cuando de lo que se trata es de hablar con quienes pueden poner remedio a los
mismos.
Visto que existe el peligro de
mirarnos continuamente a nosotros mismos, con todos nuestros defectos,
pequeñeces y pecados, y olvidar a esa multitud de personas que siguen fuera de la Iglesia y que necesitan el
testimonio de nuestra fe, esperanza y caridad.
Visto que pensamos que hay otros que
no merecen el perdón de Dios, cuando en realidad nadie lo merece (nosotros
tampoco), sino que Cristo lo ofrece a todos aquellos que se convierten de
corazón.
Visto que podemos caer en el agujero
de hablar más de los errores de la
Iglesia que de los cientos de abortos que se cometen cada año
en nuestra zona y en todo el mundo, que podemos dedicarnos a la crítica por la
crítica mientras olvidamos que cada año mueren millones de personas de hambre o
miles de ancianos sin que nadie les acompañe en sus últimos años.
Visto que nos ahogan miles de quejas
con las que señalamos una y otra vez a los demás mientras olvidamos nuestros
propios pecados y defectos.
Se instituye, al día de hoy, una oficina de recolección de quejas.
Su funcionamiento se estipula como sigue:
No se admiten quejas, sin meditar en la mujer
sorprendida en adulterio y llevada ante Jesús.
1. No se admiten quejas de cosas simplemente escuchadas pero no comprobadas.
2. No se admiten quejas que nazcan de envidias, rencores, odios y desengaños del
pasado o del presente.
3. No se admiten quejas anónimas.
4. No se admiten quejas que suponen en los demás intenciones desconocidas y que
incurren, por lo mismo, en juicios temerarios o en el delito de la calumnia.
Antes de presentar una queja, medítala ante el Señor
5. Se admiten aquellas quejas basadas en hechos reales y comprobados.
6. Se admiten quejas acompañadas de propuestas concretas de solución.
7. Se admiten quejas que se ofrecen con el deseo sincero de ayudar a otros, no
las que simplemente buscan hundir a los demás.
8. Se admiten quejas maduradas en la oración y orientadas a promover una vida
evangélica, litúrgica y eclesial profunda, fervorosa, responsable y alegre.
9. Se admiten quejas sobre temas importantes, no sobre asuntos de nuestra vida
comunitaria que no tienen mayor relevancia.
10. Se admiten quejas que ayuden a orientar nuestros corazones a la misión y al
rescate de tantos hermanos nuestros que se han alejado de la fe o que nunca han
conocido realmente a Cristo.
11. Se admiten quejas que nacen del deseo sincero y práctico de mejorarnos antes
a nosotros mismos que a los demás; quejas acompañadas de actos concretos de
caridad, de servicio, de ayuda, de oraciones por nuestra comunidad, por la Iglesia entera, por todos
los hombres y mujeres, especialmente por los más necesitados.
12. Se admiten quejas que nos lleven a despertar del letargo en el que nos
sumerge el vicio de la avaricia y nos ayuden a vivir la auténtica pobreza
evangélica, a compartir nuestros bienes con los necesitados y nuestro tiempo
con quienes anhelan un poco de cariño y de atenciones.
¿Os parece bien poner siempre las quejas ante la Cruz?
Una vez recogidas, las quejas
serán estudiadas en la oración para que, si así lo quiere Dios, puedan
ayudarnos a mejorar la propia vida y la de la quienes están a nuestro lado.
Desde la fuerza de la gracia divina,
esas quejas podrán convertirse en motivo de conversión. Sólo entonces nos permitirán
crecer cada día en el Amor a Dios y a nuestros hermanos, sobre todo cuando son
débiles, frágiles y pecadores como nosotros, y necesitan menos críticas
destructivas y más cariño sincero que culmina en una corrección fraterna
auténticamente cristiana.
¿Quién puede dudar de la Divina Misericordia?
¿Y nosotros hasta dónde estamos dispuestos a perdonar?
¿Y nosotros hasta dónde estamos dispuestos a perdonar?
Firmado y sellado con una oración a Jesucristo,
manso y humilde de Corazón,
Virgen acogedora
y a la Virgen , Madre del buen
consejo,
en el día de hoy 15 de noviembre,
el año de gracia del Señor dos mil y.doce..”
Cofeccionado con imágenes y comentarios de Franja.
Preguntas o comentarios al autor
P. Fernando Pascual LC
http://www.es.catholic.net/aprendeaorar/32/250/articulo.php?id=51963
Imágenes del departamento de confesión de quejas
Como Cristo...perdonando
Imágenes del departamento de confesión de quejas
Como Cristo...perdonando
MAS QUE QUEJAS HAY QUE AGRADECR AL SEÑOR
ResponderEliminarQUE ESTAMOS VIVOS..
POR LO QUE NOS ESTAMOS QUEJANDO TODO
ES POR LOS POLITICOS Y SU COMITIVA QUE TENEMOS
EN CADA PAIS...
ELLO PIENSAN EN SUS BOLSILLOS Y NO EN EL PAIS...
SOLO DEBEMOS REZAR DÍA Y NOCHE,,,
ENTREGARNOS CON FE Y CONFIAR EN EL SEÑOR
QUE ÉL SIEMPRE BUSCA LO MEJOR PARA NOSOTROS Y COMO SOMO MUCHOS, DEMORA UN POCO MAS DE LO QUE NOSOTROS QUEREMOS QUE ACTUE...
UNIDOS OREMOS POR LA PAZ DEL MUNDO...
MARÍA DEL VALLE