Blog católico de Javier Olivares-baionés jubilado-Baiona
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Jesús
Mateo, es un sacerdote amigo de Valladolid, que me manda diariamente un lindo comentario del Evangelio, que vale
la pena meditarlo y compartirlo, además de con los sacerdotes, también con
los seglares que lo soliciten.
Lo
pongo también todos los días en uno de mis Blogs. Franja.
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15
de Marzo, Domingo, de 2020.
Comentario: "LA
SAMARITANA" "SEÑOR, DAME DE ESA AGUA, ASÍ NO TENDRÉ MÁS SED".(Jn 4, 5-40)
Permitidme
que recuerde el "coronavirus" con motivo del Evangelio de hoy.
(Rezamos por los enfermos, y para que no se propague más esta pandemia; y
obedecemos a los médicos que nos invitan a lavarnos las manos con frecuencia).
La
Liturgia de este día usa el simbolismo del agua. El agua natural es esencial,
imprescindible.
Nos
lavamos, nos purificamos. Sacia nuestra sed. Es un auténtico tesoro. Es un don
de Dios.
Moisés
en la primera lectura de la Misa de hoy la hace manar de una piedra en el Monte
Horeb.
Esa
agua anuncia el agua viva que promete el Señor a la Samaritana.
Esa
agua es la Gracia Santificante, que nos transforma, que nos diviniza y que nos
hace hijos de Dios.
Sin
ella estamos muertos en el orden sobrenatural. Es nuestra mayor riqueza.
Es
nuestra mayor riqueza.
Más
importante que el dinero, la salud, la belleza, la ciencia.
Es
el tesoro que descubre el labrador en el campo; es la piedra preciosa.
Es
lo único necesario, lo único decisivo en nuestra vida cristiana :
VIVIR EN GRACIA DE
DIOS.
Es
por lo que merece la pena luchar, sufrir y hasta morir como han hecho los
mártires y los santos.
Qué
bien nos viene el Salmo Responsorial de hoy:
""Ojalá escuchéis hoy la
voz del Señor: No endurezcáis vuestro
corazón" (Salmo 94, 1-9).
Dios
nos habla "de diversas maneras; en estos días, a través del
"coronavirus", nos pide que nos convirtamos, que volvamos a Dios de
todo corazón. No cerremos nuestro corazón. Renovemos la gracia Bautismal.
Restauremos nuestra vida cristiana.
En
esto consiste nuestra felicidad: "Si conocieras el don de Dios", le
dice Jesús a la Samaritana.
Tú y yo le pedimos: ¡¡¡JESÚS, QUE YO TE CONOZCA
Y TE AME!!!
"El
"Virus" que mata la gracia santificante es el pecado. Luchemos contra
el pecado venial que oculta en nosotros la imagen de Dios.
Luchemos
contra el pecado mortal que destruye nuestra vida espiritual totalmente.
Contamos
con la gracia de Dios, que nunca nos va a faltar.
El
nos la ha dado a raudales en ese Sacramento maravilloso que es el Sacramento de
la Penitencia. Sacramento de la paz y de la alegría; el Sacramento del
encuentro con Dios, que cada día tenemos que estimar más".
(Juan
José Asenjo. Arzobispo de Sevilla)
Jesús
Mateo. Sacerdote.
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Que
Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone
nunca. Franja.
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Confeccionado
por Franja
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