D. Jesús Mateo es un
Sacerdote amigo de Valladolid, que me manda diariamente un lindo comentario del Evangelio, que vale
la pena meditarlo y también compartirlo,
además de con los sacerdotes también con
los seglares que lo soliciten. Lo pongo también todos los días en dos de
mis Blogs católicos. Franja
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17 de Septiembre, jueves
de 2020.
Comentario del Evangelio: "SUS MUCHOS PECADOS HAN QUEDADO PERDONADOS PORQUE HA AMADO MUCHO" (Lc 7, 36-50)
Es una joya el Evangelio
de hoy. Nos hará mucho bien.
Tres son los
protagonistas:
Jesús, un fariseo llamado Simón y una mujer.
(¿No te impresiona la
conducta de esta mujer?
Trae un frasco de alabastro lleno de perfume; llora; riega con sus lágrimas los pies de Jesús; se los enjuga con los cabellos de su cabeza, los cubre de besos y se los unge con el perfume" ¡Qué mujer más detallista! ¡Qué amor el de esta mujer!)
El fariseo piensa mal de
ella y se escandaliza de su presencia. Sabe que es una pecadora; y piensa que Jesús
no es profeta y desconoce qué clase de mujer es la que lo está tocando y
lavando sus pies
( Este hombre es malo; tiene su corazón duro; condena, sin piedad, a esta mujer y no está de acuerdo de que haya entrado en su casa: una pecadora)
¿Qué hace Jesús? ¿Cómo va a actuar? Verás. Le dice, Simón: Tengo algo que decirte: Un prestamista tenía dos deudores; uno le debía quinientos denarios y el otro cincuenta. Como no tenían con qué pagar, los perdonó a los dos. ¿Cuál de los dos le mostrará más amor? Simón contestó: Supongo que aquel a quien perdonó más. Jesús le dijo: Has contestado rectamente.
Y volviéndose a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves a esta mujer? He entrado en tu casa y no me has dado agua para los pies; ella en cambio, me ha regado los pies con sus lágrimas y me los ha enjugado con sus cabellos. Tú no me diste el beso de la paz; ella, en cambio, desde que entró, no ha dejado de besarme los pies. Tú no me ungiste la cabeza con ungüento; ella, en cambio, me ha ungido los pies con perfume. Por eso te digo: sus muchos pecados han quedado perdonados porque ha amado mucho; pero al que poco se le perdona, ama poco. Y a ella le dijo: Han quedado perdonados tus pecados. Tu fe te ha salvado, vete en paz.
Me llama la atención cómo el Señor echa en falta los detalles de cariño del fariseo y cómo agradece los de la mujer, y cómo al que ama mucho se le perdona mucho, y al que ama poco se le perdona poco.
Que el Señor nos conceda la gracia de parecernos a esta mujer
en su fe, en su delicadeza, en su AMOR y en el arrepentimiento de sus pecados.
Jesús Mateo. Sacerdote.
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Que Dios pague este esfuerzo diario y que Santa María la Virgen
no nos abandone nunca. Que el Señor nos
bendiga y nos guarde. Un abrazo.
Franja.
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Confeccionado por Franja.
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"Me ha ungido los pies
con perfume".
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