Blog católico de Javier Olivares-baionés jubilado-Baiona
Examen de conciencia
En manos de Dios
Es bueno, de vez en cuando, detenerse y repasar la propia vida
delante de Dios. Este texto puede ser una ayuda para hacerlo, utilizándolo todo
o una parte. Y también puede ser útil para el examen de conciencia en el
sacramento de la Reconciliación.
1. Respecto a Dios y a la vida de fe.
- ¿Tengo presente a Dios en mi vida? ¿Quiero que todo lo que soy
y hago se dirija a Dios? ¿Pongo en él la confianza fundamental de mi vida, o la
pongo en otras cosas?
- ¿Tengo momentos de oración, de diálogo confiado con Dios?
- ¿Participo en la oración de la Iglesia especialmente en la
Eucaristía de los domingos?
- ¿Mi vida es un verdadero testimonio del Evangelio, de modo que
los demás, al verme, se sientan atraídos a la fe? ¿Me he mostrado cristiano en
mi vida privada y pública?
- ¿Me preocupo por mi formación cristiana, escuchando y leyendo
la Palabra de Dios, y participando en las catequesis y otros encuentros de
reflexión?
- ¿Sostengo económicamente las. necesidades de la Iglesia?
2. En la relación con los demás
- ¿Tengo claro que ser cristiano implica no desentenderse de los
demás? ¿Tengo verdadero amor a los demás, o me sirvo de ellos para mis
intereses? ¿0 quizá hago a los demás lo que no quisiera que me hicieran a mí?
- ¿Sé escuchar a los demás, descubrir la parte de verdad que
tienen? ¿Sé dialogar, comprender, aceptar las opiniones y pareceres de los
demás? ¿Hago todo lo que puedo para superar las disensiones y situaciones de
tirantez?
- ¿He violado la vida, la integridad física, o los bienes de los
demás? ¿Les he producido algún daño? ¿He tenido odio a alguien?
- Si conduzco un coche u otro vehículo, ¿lo hago como es debido?
Si me he encontrado con algún accidente, ¿he prestado mi ayuda cuando era
necesario?
- ¿He robado o he deseado injusta y desordenadamente los bienes
de los demás o les he producido perjuicios? Si ha sido así, ¿he procurado
restituir y reparar los daños que he causado?
- ¿He engañado o estafado en los negocios?
- Si he sido injuriado, he procurado la paz y he estado
dispuesto a perdonar, o bien conservo odio y deseo de venganza?
- ¿He respetado al marido o la mujer de los demás? ¿Soy
consciente de que el sexo no es un simple instrumento de placer, sino que está
destinado al amor?
- ¿He mantenido la verdad y la fidelidad, o bien he dañado a los
demás con falsedades, calumnias, juicios temerarios o la violación de algún
secreto? ¿Me gusta murmurar y criticar? ¿He propagado rumores que creaban mal
ambiente y desánimo? ¿He difundido insinuaciones maliciosas, medias palabras o
juicios que contribuyan a dar mala fama y a dañar a otros? Cuando alguien ha
sido acusado o criticado injustamente, ¿me he desentendido del tema en lugar de
defenderlo y testificar a su favor?
- ¿He sentido envidia de las cualidades de los demás? ¿He
intentado desacreditar a alguien por envidia?
- ¿Respeto los derechos de los demás en las cosas pequeñas de
cada día, por ejemplo en las colas de las tiendas o los autobuses, no queriendo
pasar cuando no me toca? ¿Procuro no molestar a los demás poniendo por ejemplo
la televisión o la radio demasiado alta, o no siendo puntual y haciendo
esperar, o hablando o haciendo ruido en los lugares en los que hay que estar en
silencio?
- ¿Procuro hacer la vida más fácil y agradable a los demás?
- ¿Soy amable?
3. En la vida de familia
- En la relación entre los esposos:
¿Me esfuerzo para que crezca
el amor entre los dos? ¿hay cariño, diálogo entre ambos, y responsabilidad
compartida, o bien me preocupo sólo de mis cosas y me creo en el derecho de
imponer siempre mis criterios? ¿mantengo firmemente la fidelidad matrimonial?
En la relación sexual, ¿me preocupo de bienestar del otro, o pienso sólo en mí?
- En la relación de los padres para con los hijos:
¿Les dedico
tiempo? ¿les doy un buen testimonio de vida humana y cristiana? ¿soy
dialogante? ¿procuro enseñarles a escoger con libertad y- responsabilidad su
camino? ¿Les enseño a compartir lo que tienen, tanto con los demás miembros de
la familia, como con los compañeros, como con los pobres?
- En la relación de los hijos para con los padres:
¿Me preocupo
de los problemas de la familia, o me desentiendo de ellos? ¿busco el diálogo
con mis padres, o más bien paso de ellos, o estoy permanentemente agresivo?
¿quiero a mis padres?
- A los ancianos de la familia, ¿les doy cariño y atención?
- En la relación entre todos los miembros de la familia,
¿colaboro para que el clima familiar sea lo más positivo posible, de modo que
todos podamos encontrarnos bien en casa?
- En mi familia,
¿vivimos sólo preocupados por los intereses
familiares (los mejores colegios para los hijos, un buen coche, etc.), o bien
somos conscientes de que debemos dedicar parte de lo que tenemos a ayudar a los
que tienen menos, y que para ello hay que rebajar el propio nivel de vida?
4. En el uso del dinero
- ¿Vivo pendiente del dinero? ¿Pienso constantemente en cómo
tener más dinero? ¿Pienso que hay que espabilarse para tener más dinero, y
dejarse de escrúpulos y preocupaciones morales?
- ¿Tengo claro que la propiedad y el dinero no tienen un valor
absoluto, que no son sólo míos, sino que implican unos deberes sociales?
- ¿Comparto mis bienes con los que tienen menos que yo? ¿Qué
parte de mi dinero dedico a la solidaridad con los necesitados, de aquí y de
los países pobres? Si tengo familiares o amigos que están en mala situación
económica, ¿cómo les ayudo?
5. En las relaciones laborales
- Si soy empresario o tengo cargos directivos, ¿me preocupo de
que los salarios de los trabajadores sean dignos? ¿hago lo que puedo para que
los efectos de las crisis económicas no recaigan sobre los que tienen menos?
¿hago mi trabajo lo mejor que puedo?
- Si soy trabajador, ¿cumplo con mi trabajo con eficacia y
dedicación? ¿soy solidario con los demás trabajadores, especialmente con los
que están en peor situación que yo, o me desentiendo de los problemas
colectivos? ¿procuro actuar con inteligencia y honestidad en las
reivindicaciones y los conflictos?
6. En la vida social
- ¿Me preocupo por el bien y la prosperidad de la comunidad de
la que formo parte, o bien llevo una vida centrada en mí mismo? ¿Pienso que el
progreso en la justicia, en la igualdad, en la superación de las diferencias
económicas y sociales, forma parte del mensaje cristiano?
- ¿Me indigno ante las injusticias, o me dejan indiferente?
¿Defiendo a los oprimidos? ¿Ayudo a los que lo pasan mal? ¿Colaboro para una
convivencia mejor para todos? ¿O bien me desentiendo (o incluso desprecio) a
los débiles, los inmigrantes, los enfermos, los ancianos?
- ¿Participo según mis posibilidades en la promoción de una vida
más digna para todos? ¿Conozco las distintas iniciativas en este sentido, como
por ejemplo la acción de Cáritas, de los grupos de ayuda fraterna, de los
grupos al servicio del Tercer Mundo, de las entidades políticas y sociales?
- ¿Participo en las actividades ciudadanas que ayudan a una
mejor convivencia?
- ¿Pago mis impuestos? ¿Cumplo con deberes cívicos?
- ¿Procuro que se conserven y que no se estropeen los bienes que
son de uso público?
- ¿Me preocupo por la protección de la naturaleza y del medio
ambiente? Cuando salgo a lugares de mar o de montaña, ¿procuro que quede limpio
allí donde he estado, y evito crear peligros de incendio o degradación?
7. Respecto a las actitudes personales
- ¿Me amo a mí mismo como Dios me ama? ¿Me acepto, con mis
limitaciones y debilidades, como Dios me acepta?
- ¿Me esfuerzo por corregir mis malas inclinaciones, como son el
abuso en comer y beber?
- ¿Llevo una vida sexual desordenada?
- ¿Dejo por pereza de realizar lo que debería?
- ¿Reacciono a menudo con ira? ¿Soy amigo de provocar conflictos
y riñas? ¿Soy protestón? ¿Lo encuentro siempre todo mal?
- ¿Afronto con entereza las dificultades de la vida?
- ¿Hago rendir las posibilidades que tengo y que Dios me ha
dado?
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