D. Jesús Mateo es un sacerdote
amigo de Valladolid, que me manda diariamente
un lindo comentario del Evangelio. Pienso que vale la pena
compartir con los sacerdotes y con los seglares que lo soliciten. Lo pongo todos
los días en dos de mis Blogs católicos. Franja
☆●☆
29 de enero, viernes de 2021
COMENTARIO DEL EVANGELIO: "LAS PARÁBOLAS DE LA SIMIENTE Y DEL GRANO DE MOSTAZA" (Mc 4, 26-34).
Una vez más manifiesto mi admiración
por la predicación sencilla y práctica de Nuestro Señor Jesucristo.
Hoy se sirve de dos parábolas agrícolas
para explicarnos el misterio del Reino de Dios.
En primer lugar LA SIMIENTE.
Esta crece y se desarrolla de
forma callada e imperceptible.
Por su propia naturaleza,
"va creciendo para dentro", nos decían nuestros familiares dedicados al campo.
Es una maravilla el sistema y el proceso del mundo vegetal, su precisión y armonía genética; su dinamismo intrínseco.
El labrador, con fe, se admira, y no se explica la perfección humana
existente, y cree en una mano y en una mente sabia de la naturaleza.
Me comentaba un buen amigo labrador
la reflexión que le había hecho un sacerdote santo, mi buen amigo D. Herminio,
q.e.p.d
"Tú como labrador, le
decía, haces muy poco; depositas el grano en la tierra y después todo lo hace
Dios". Pues, mira: en el mundo de la gracia ocurre algo análogo.
Dios actúa en las almas de modo
imperceptible, pero real y eficaz. Hace fructificar, madurar y obrar el bien
desde dentro del corazón con sus mociones, luces y carismas.
Es Dios quien nos inspira los
pensamientos, deseos y obras; el que nos da luz para ver lo que Él quiere de nosotros y nos da fuerza para
llevarlo a cabo. Él es el que produce frutos abundantes en nuestra vida.
ES UNA MARAVILLA. TODO ES
GRACIA DE DIOS. OBRA DEL ESPÍRITU SANTO.
La segunda parábola es la del grano de mostaza.
Me lo enseñaron en Tierra Santa.
Es la hortaliza más pequeña y
se transforma en un arbusto que da cobijo a los pájaros y estos anidan en sus
ramas.
El mundo, y el espíritu del
mundo, se fija sobre todo en lo grande, en lo espectacular.
Y no da importancia a lo pequeño, al encanto y a la belleza de las cosas pequeñas. Y esto es lo que cambia al mundo. Las vidas entregadas, humildes, ocultas, son las que deciden el destino de los pueblos. Los santos son los que cambian la sociedad.
Las almas de Dios, sencillas,
humildes, con el Rosario en la mano, han conservado la fe en nuestras familias.
El ejemplo de unos padres santos nos mueve a los hijos a imitar su vida.
La vida oculta de la Santísima
Virgen es un auténtico testimonio para ti y para mí.
Jesús Mateo. Sacerdote.
*☆●☆*
Que Dios pague ese esfuerzo
diario y que Santa María la Virgen no nos abandone nunca. Franja.
Confeccionado o adaptado por
Franja para ponerle en dos de los Blogs católicos de Javier Olivares. baionés
jubilado. Baiona. A veces lo he puesto en tres de los blogs, para que los que
vayan buscando un comentario de Santo Evangelio, encuentren mayores
probabilidades.
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