Comentario del PRÓLOGO del Evangelio de S. Juán: "Y EL VERBO SE HIZO HOMBRE Y HABITÓ ENTRE NOSOTROS" (Jn 1, 1-18).

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D. Jesús Mateo es un sacerdote amigo de Valladolid, que me manda diariamente  un lindo comentario del Evangelio. Pienso que vale la pena compartirlo con los sacerdotes y con  los seglares que lo soliciten. Lo pongo todos los días en dos de mis Blogs católicos. Franja

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3 de Enero, Domingo de 2021

Comentario del PRÓLOGO del Evangelio de S. Juán: "Y EL VERBO SE HIZO HOMBRE Y HABITÓ ENTRE NOSOTROS" (Jn 1, 1-18).

Es espléndido  el prólogo del Evangelio de San Juan que hoy leemos. El Evangelista nos da la mejor de todas las noticias: ¡¡¡DIOS ESTÁ CON NOSOTROS!!! ¡¡¡SOMOS HIJOS DE DIOS!!! Y Él que es AMOR viene buscando amor.

Y la triste noticia, como dice San Francisco de Asís, es que el Amor no es amado.

En la tierra no acogemos el don de lo alto. Renunciamos al TESORO de valor infinito a cambio de las baratijas que nos ofrece el mundo.

Sí, tú y yo, somos unos necios e insensatos. Dios se hace un pordiosero. Se hace el encontradizo conmigo...alarga la mano...y me pide lo que llevo. Sólo un grano de trigo, de los mil que llevo, le entrego.

Ese grano se convirtió en oro...y por la noche lloré mi tacañería. ¿Por qué no le di el talego entero? De haberlo hecho, sería rico, millonario, comenta el poeta.

El Señor mendiga a la puerta de mi corazón: Si le abro entrará y cenará conmigo (Ap 3, 20) Me ofrece su amistad, su preciosa intimidad.

El Evangelio tiene una frase muy triste, estremecedora: "Vino a los suyos y los suyos no le recibieron". Sin Cristo estamos tristes, solos, perdidos.

Ay del alma en la que no vive, ni mora ni transita Cristo, está desolada, oscura, fria, sin vida.

En cambio, si dejamos entrar a Cristo en nuestra alma, esta será morada de paz, de amor, llena de frutos.

Quienes acogen a Jesús sin reservas reciben la mayor bendición de Dios como leemos en el Evangelio de hoy : SER HIJOS DE DIOS. Es el don más grande.

El mayor poder: ser hijos de Dios: mi Padre bueno, cercano y omnipotente Qué alegría: ¡¡¡DIOS ES MI PADRE!!!

Virgen María, haz que yo abra de par en par las puertas de mi corazón a tu Hijo, como se las abriste tú, Madre de Dios y Madre mía.

Jesús Mateo. Sacerdote.

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Que Dios pague este  esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone  nunca. Que el Señor nos bendiga y nos guarde. Un abrazo.   Franja.

Confeccionado o adaptado por Franja para ponerle en dos de los Blogs católicos de Javier Olivares. baionés jubilado. Baiona. A veces lo he puesto en tres de los blogs, para que los que vayan buscando un comentario de Santo Evangelio, encuentren mayores probabilidades.

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