Blog católico de Javier Olivares-baionés jubilado-Baiona
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Jesús Mateo, es un sacerdote amigo de Valladolid, que me manda
diariamente un lindo comentario del
Evangelio, que vale la pena meditarlo y compartirlo, además de con los
sacerdotes, también con los seglares que
lo soliciten. Y lo pongo también todos los días en uno de mis Blogs. Franja.
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12 de Febrero, Miércoles de 2020
Comentario "ESCUCHAD
Y ENTENDED TODOS". (Mc 7, 14-23).
A los Apóstoles, y a la gente que escuchaba les costó entender
el Evangelio que a continuación puedes leer:
"Llamó Jesús de nuevo a la gente y les dijo: Escuchad y
entended todos: Nada que entre de fuera puede hacer al hombre impuro; lo que
sale de dentro es lo que hace impuro al hombre. Cuando dejó a la gente y entró
en casa, le pidieron sus discípulos que les explicara la parábola. El les dijo:
¿También vosotros seguís sin entender? ¿No comprendéis? Nada que entre de fuera
puede hacer impuro al hombre, porque no entra en el corazón, sino en el
vientre, y se echa en la letrina. Con esto declaraba puros todos los alimentos.
Y siguió: Lo que sale de
dentro del hombre, eso sí hace impuro al hombre. Porque de dentro del corazón
del hombre, salen los pensamientos perversos, las fornicaciones, robos,
homicidios, adulterios, codicias,
malicias, fraudes desenfreno, envidia, difamación, orgullo, frivolidad. Todas
esas maldades salen de dentro y hacen al hombre impuro".
Señor, comienzas diciéndonos: "Escuchad y entended
todos". Yo me siento aludido por estas palabras. Me cuesta escucharte y
muchas veces no te entiendo.
Tengo el peligro de pensar en Ti, Jesús, como en alguien que me
incordia y me prohíbe, alguien que me complica la vida con normas y exigencias.
En cambio Tú nos explicas que es el buen
corazón del hombre, quien exige esos comportamientos: Hay actos que manchan, enferman
al hombre y lo hacen impuro y malo.
Yo soy consciente, Jesús, de que de mi corazón salen envidias, malos pensamientos, que me
dan vergüenza; me cuesta perdonar. Como dices en el Evangelio: del corazón del
hombre salen pensamientos perversos, fornicaciones, fraudes,
envidias, adulterios, codicias, envidias, difamaciones,
orgullo...
Tú, Señor, conoces mejor que nadie el corazón del hombre.
Conoces mi corazón, la fuente de todo lo que siento, digo y hago. Podré ocultarlo a los demás, no a Ti. Siento
vergüenza por todo lo malo que sale de mi corazón.
Tú y yo le decimos de corazón: Cúranos Señor, purifica nuestro
corazón, cámbianos por dentro.
Tú ves y conoces nuestro corazón
tal y como es.
Te pedimos con El Rey David en el Salmo Miserere: "Oh Dios,
crea en mí un corazón puro, renuévame
por dentro con espíritu firme"... "Borra mis pecados".
Señor, yo sé, que si me arrepiento, por muy graves que sean mis
pecados, Tú los arrojas a lo más profundo del mar donde jamás volverán a
aparecer.
¡¡¡Qué bueno eres, Dios mío!!!
Jesús Mateo. Sacerdote
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Que Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen
no nos abandone nunca. Franja.
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Confeccionado por Franja
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