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martes, 5 de julio de 2022

COMENTARIO: "JESÚS AL VER A LAS MUCHEDUMBRES, SE COMPADECÍA DE ELLAS, PORQUE ESTABAN EXTENUADAS Y ABANDONADAS, COMO OVEJAS QUE NO TIENEN PASTOR". (Mt 9, 32-38).

Blog católico de Javier Olivares-baionés jubilado-Baiona

D. Jesús Mateo es un sacerdote amigo de Valladolid, que me manda diariamente  un lindo comentario del Evangelio. Pienso que vale la pena compartirlo con los sacerdotes y con  los seglares que lo soliciten. Lo pongo todos los días en tres de mis Blogs católicos para mayor difusión.  P. Franja

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5 de Julio, martes 2022

COMENTARIO: "JESÚS AL VER A LAS MUCHEDUMBRES, SE COMPADECÍA DE ELLAS, PORQUE ESTABAN EXTENUADAS Y ABANDONADAS, COMO OVEJAS QUE NO TIENEN PASTOR". (Mt 9, 32-38).

Señor, también hoy, al ver a las gentes de nuestro tiempo, te compadeces de ellas. Estamos extenuados bajo el peso del pecado y de la cultura reinante. Los "falsos pastores" engañan y abandonan a sus ovejas.

Tú, Señor, eres el Buen Pastor, el Pastor con el corazón más grande para cuidarnos y compadecerte de este mundo y llevarnos a "verdes praderas".

Me quería fijar en lo que hoy más me ha llamado la atención, en dos palabras "ver" y "compadecerse". "Al VER a la muchedumbre se COMPADECÍA de ella". Me cautiva la mirada de Jesús. En esta ocasión es una mirada tierna, dulce, llena de misericordia y de compasión. Se compadece de las gentes porque las ve extenuadas y abandonadas como ovejas sin pastor.

Señor, ¿cómo me ves y me miras a mí? Me gustaría ver tu mirada, Jesús. ¿Cómo nos mira a ti y a mí? Yo estoy convencido de que nos mira con mucho cariño y con mucha ternura. No lo dudo. Pero, pienso, también, que nos mira con mucha exigencia. Espera más de ti y de mí. Y nos mira a través de la mirada de su Madre y Madre nuestra. 

Hablando el otro día con una madre me comentaba que su hijo, adolescente, había sacado buenas notas pero que el profesor le habló muy claramente y le dijo que para él no eran buenas notas porque podía haber sacado mucho mejores. Tienes que ir por el diez le dijo el profesor al alumno delante de su madre.

Nuestro Dios es un Dios exigente, lo pide todo. Sí. Te mira con amor, pero también con mucha exigencia. De ti y de mí Dios espera mucho más: el diez, el sobresaliente, las "manos llenas de buenas obras".

Jesús Mateo. Sacerdote.

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Que el Señor nos bendiga y nos guarde con Santa María la Virgen y con San José su castísimo esposo. Un abrazo.  P. Franja.

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Confeccionado en el Blog de Franja

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