Blog católico de Javier Olivares-baionés jubilado-Baiona
Cuidado con las malas compañías.
Si les haces bien, tendrás que aceptar el peligro al que te expones.
Pero haz el bien...sin mirar a quién, dice el refrán...y es más cristiano.
Al final puedes ganarte al amigo y al enemigo
El
lobo atragantado y la grulla.
A
un lobo que comía un hueso, se le atragantó el hueso en la garganta, y corría
por todas partes en busca de auxilio.
Encontró
en su correr a una grulla y le pidió que le salvara de aquella situación, y que
enseguida le pagaría por ello. Aceptó la grulla e introdujo su cabeza en la
boca del lobo, sacando de la garganta el hueso atravesado. Pidió entonces la
cancelación de la paga convenida.
“Oye
amiga”, dijo el lobo, “¿No crees que es suficiente paga con haber sacado tu cabeza
sana y salva de mi boca?”
Nunca
hagas favores a malvados, traficantes o corruptos, pues mucha paga tendrías si
te dejan sano y salvo.
Fábula
de Esopo
Fuente:
http://www.edyd.com/
La
fábula de hoy afirma lo que todos sabemos es cierto pero que insistimos en
ignorar.
Son
muchos los que se asocian y relacionan con personas de reputación dudosa tan
sólo porque les parece que habrá de beneficiarles ya sea social ó
económicamente, tan sólo para descubrir, tarde o temprano, que la reputación de
dichas personas vuelve a confirmarse con ellos mismos.
Eso
me recuerda aquel viejo dicho: “genio y figura, hasta la sepultura”, adagio
para el que la única cura real es un encuentro personal con el Señor Jesucristo
que transforme nuestro ser interior.
De
no haber tal transformación, seguiremos siendo increíblemente predecibles en
nuestra conducta… y es que el enemigo de nuestras almas no es creativo sino que
su agenda—la de hurtar, matar y destruirnos—sigue siendo la misma a través de
los siglos.
Cuidémonos
de nuestras relaciones pero sobre todo, acerquémonos a Quien nos puede cambiar
en nuevas personas. Adelante y que el Señor les bendiga.
Raúl
Irigoyen
El
Pensamiento Del Capellán
No hay comentarios:
Publicar un comentario