Blog católico de Santa María de
Baiona la Real, nº. 838
Catequesis
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HORÓSCOPOS
Es malo creer en los horóscopos?
Recursos Catequesis
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Tengo pena y mucha pena, cuando veo a esa gente que se mete por esos caminos tan "extravagantes", -nunca
mejor empleada la palabreja, porque significa caminar fuera del camino
normal- que pueden llevar al camino equivocado, porque no es el que Dios escogió para cada uno de nosotros.
Franja
"Enseñarás a volar, pero no volarán
tu vuelo. Enseñarás a soñar, pero no soñarán tu sueño. Enseñarás a vivir, pero
no vivirán tu vida. Sin embargo... en cada vuelo, en cada vida, en cada sueño,
perdurará siempre la huella del camino enseñado." Madre Teresa De Calcuta.
Por eso encuentro este artículo con el tema, que desde la óptica cristiana, nos hace ver la verdad para no "extravagar"
¿Es malo creer en
los horóscopos?
Los horóscopos
pueden robar nuestra confianza en Dios porque hacen creer que no somos libres, sino que estamos determinados por nuestro signo zodiacal.
Autor: Alejandro García del Olmo
Fuente: es.catholic.net
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Es muy normal
que tengamos curiosidad por saber qué pasará en el futuro, pero dime ¿qué
harías si supieras qué va a ser de ti mañana?
Quizá si supieras que vas a ser un gran empresario, empezarías a ver de qué
manera manejar mejor tu dinero; o si supieras que te enfermarás, comenzarías
con poner todos los medios para prever dicha enfermedad y, si en el peor de
los casos, te dicen que morirás, seguramente comenzarías de inmediato a dejar
listos esos pendientes que tienes, y sobre todo te acercarías a la confesión para
estar en gracia.
¡Cuántas cosas haríamos!, ¿verdad? Nosotros, cristianos, no consultamos
horóscopos o personas que supuestamente dicen el futuro, porque ello
contradice el honor y el respeto que debemos a Dios.
Querer saber el futuro es querer ser iguales a Dios, pretensión tan soberbia
como absurda. Debemos confiar a la Providencia divina nuestra vida, confiar
en Dios como Padre que es.
Así que olvídate de andar por ahí con consultas a los astros, horóscopos y
adivinos.
Lo que te recomiendo es que comiences hoy por hacer todas esas cosas que
harías si supieras tu futuro. No te preocupes del mañana, mejor ocúpate del
presente.
La ciencia que responde a los interrogantes que nos provocan las estrellas es
la astronomía. Esta disciplina nació entre los caldeos hace unos treinta o
cuarenta siglos y sigue progresando hoy gracias a los programas espaciales de
Estados Unidos y Rusia.
Junto a este saber, como hongo nacido en medio de un hermoso jardín, apareció
la astrología, ficción que pretende determinar una supuesta influencia sobre
nuestras vidas por parte de los cuerpos celestes.
La palabra "horóscopo" se utilizaba en los siglos pasados para
designar a los sacerdotes encargados de observar el curso de las estrellas.
Luego pasó a significar la influencia que los astros habrían de tener sobre
nuestras vidas. Esta creencia tan absurda, sigue influyendo en algunas
personas de nuestro nuevo siglo XXI.
El zodiaco es una franja imaginaria del firmamento donde aparecen doce
constelaciones que se pueden observar a simple vista. Las doce constelaciones
del zodiaco son Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpión,
Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis.
Estos doce nombres provienen de palabras latinas que indican diversas
divinidades mitológicas veneradas entre los antiguos caldeos. Los horóscopos
dicen que nuestra vida depende de la constelación zodiacal que hace sentir su
influencia en el mes de nuestro nacimiento. Si nací en enero soy Acuario; si
nací en agosto, soy Leo... etc.
La creencia en los horóscopos es peligrosa. Casi es como creer en otra
religión. Porque intentan hacernos creer que no somos libres sino que estamos
determinados en todo por nuestro signo zodiacal. No sería yo quien realiza su
propia vida, sino que todo mi obrar estaría dirigido por una extraña fuerza
proveniente de las estrellas. Pero nada de lo que dicen los horóscopos está
científicamente fundado. Lo que afirman sobre Sagitario hoy, lo dirán mañana
de Piscis y viceversa. Es un triste problema que los horóscopos sigan
haciéndose y, peor aún, que haya quienes se creen todo lo que leen.
No es lícito ni conveniente, pues puede robar nuestra confianza en Dios.
Por otra parte, el que verdaderamente confía, cree y ama a Dios no busca
símbolos o signos del cielo ni de la tierra, como bien lo explica Nuestro
Señor: ¿Sabéis interpretar el aspecto del cielo y de la tierra y no sabéis
distinguir los signos de los tiempos...? (Mt. 16, 1-4).
A veces nos puede ganar la curiosidad de saber lo que dirán de nuestro
futuro; pero lo único que conseguimos es poner nuestro mayor tesoro, la vida,
en manos de suposiciones tan genéricas y ambiguas que le podrían pasar a
cualquiera.
Dios te cuida y te ama personalmente, ¿por qué quieres encerrarte en 12
símbolos?, que si los dividimos entre la población mundial, 6 mil millones de
habitantes, a 500 millones de personas les pasaría lo mismo, lo cual no sólo
es aburrido sino incluso contrario a nuestra experiencia ¿no crees?
Los cristianos debemos más bien dedicar nuestro tiempo a pedir a Dios que nos
aumente la fe y que nos ayude a evitar todo lo que nos aparte de Él.
Espero que le aclare las ideas a más de uno y que apartéis de ese camino que descamina del camino verdadero, a todos los que veáis por el camino de los horóscopos, del tarot o del espiritismo. Todo eso nos aparta del camino verdadero... del camino del cristiano
Franja
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